Introducción al cobro con tarjeta
El cobro con tarjeta es una de las opciones de pago más elegidas en los comercios online. Tiene ventajas tanto para los clientes como para los comercios, y es la opción más recomendada para hacer cobros recurrentes por las posibilidades de automatización que ofrece. Además, la seguridad y comodidad del cobro con tarjeta hace que la tasa de conversión aumente notablemente.
El cobro con tarjeta es, en definitiva, la forma de pago online más extendida y aceptada entre compradores y negocios.
El proceso de cobro con tarjeta se inicia cuando el comprador elige la opción de pago con tarjeta en el checkout de compra. Cuando el cliente introduce sus datos de pago, el comercio solicita al banco emisor de la tarjeta la transferencia de fondos y si este lo autoriza porque cuenta con los fondos suficientes, el banco adquirente (del comercio) recibe el importe del pago. Además, se produce un paso adicional cuando el comprador debe hacer una doble autenticación para aumentar la seguridad del pago con tarjeta, tal y como marcan la PSD2 y el 3D Secure.
Tarifas de procesamiento de tarjetas de crédito
Para cobrar con tarjeta, los negocios deben pagar una serie de tarifas de procesamiento de tarjetas de crédito aplicadas por las distintas partes implicadas en el proceso de cobro por tarjeta y también por diversos motivos. Veamos cada una de ellas para comprender por qué se cargan al hacer un cobro con tarjeta.
- Tarifa de intercambio
El banco del negocio paga una comisión al pago emisor por los costes de gestión y por cubrir el riesgo de fraude, entre otros. El precio de esta tarifa está marcado por distintos factores: el tipo de tarjeta (débito o crédito), el propietario de la tarjeta (empresa o particular), el importe de la operación y el tipo de negocio que recibe el pago. La mayoría de estos factores están relacionados con el riesgo que asume el banco al hacer la transacción y los precios de las tarifas están marcados para cada entidad bancaria por el Banco de España, que las actualiza cada año.
- Tarifa de servicio
Se pagan directamente a las redes de tarjeta según las ventas mensuales que se realizan.
- Tarifa del procesador de pago
Por último, por cada transacción que se realiza con el cobro con tarjeta se paga una comisión al procesador de pago. Es decir, se paga en función del uso que se hace del servicio. La empresa responsable de gestionar el cobro con tarjeta aplica una tarifa por cada transacción que procesa.
¿Se puede cobrar comisiones por pagar con tarjeta a clientes?
A la hora de cobrar con tarjeta, es fundamental que los negocios conozcan todas y cada una de las comisiones que van a pagar por transacción para calcular los márgenes adecuados y establecer sus precios. Muchas veces, los comercios no conocen los cargos que se aplican a sus cobros con tarjeta, pero saberlo con exactitud es fundamental para ajustar los precios de los productos o servicios a los costes que implica el cobro con tarjeta.
Ante esta situación, muchos negocios se preguntan si pueden cobrar las comisiones del cobro con tarjeta a los clientes y la respuesta es que no.
Cobrar un recargo a los clientes que van a pagar con tarjeta es ilegal, sin embargo, hay maneras de reducir estas comisiones a través de alternativas. Algunos negocios marcan una cantidad mínima para hacer cobros con tarjeta, otras buscan procesadores de pago alternativos que han surgido con las facilidades digitales.
Formas de reducir las comisiones de cobro por tarjeta
Existen toda una serie de soluciones y alternativas que pueden utilizar los comercios para reducir las comisiones del cobro por tarjeta.
Ya que el cobro con tarjeta se ha convertido en un imprescindible para cualquier comercio online, también lo es encontrar formas de reducir los costes de los cobros con tarjeta, ya que es un coste decisivo en muchos negocios.
Negocia las tarifas de procesamiento de pago
Si bien las tarifas de intercambio no dependen de las entidades bancarias, hay otras comisiones de servicio que sí lo hacen. Una de las formas para reducir las comisiones de cobro por tarjeta es negociar las tarifas de procesamiento de pago con el proveedor de tarjetas y la entidad bancaria, las cuales están dispuestas a ajustar sus tarifas en función de la transaccionalidad del negocio,
Elige un proveedor de cobro con tarjeta con tarifas bajas
Otra forma de reducir las comisiones de cobro con tarjeta es eligiendo un proveedor de pagos online con tarifas más bajas. Actualmente la oferta de este tipo de servicios es muy amplia y está disponible online, por lo que se pueden comparar las distintas plataformas de pago online y elegir aquella que ofrezca las mejores condiciones para tu negocio. Algunos proveedores de pagos ofrecen descuentos o facilidades cuando el volumen transaccional es alto.
Reduce las devoluciones con tarjeta
Otras de las comisiones añadidas al cobro con tarjeta son aquellas que se aplican cuando se tiene que devolver un cobro. Esta situación se da porque se puede anular un pago con tarjeta si un cliente lo solicita, pero hacerlo conlleva unos costes adicionales para el negocio que debe pagar por la devolución. Mejorando la comunicación con los clientes se consigue reducir las devoluciones y, por lo tanto, las comisiones que implican.
Establece un importe mínimo para los cobros con tarjeta
Una de las formas más habituales de reducir las comisiones de cobro por tarjeta es limitando el importe mínimo por el cual se puede hacer un pago con tarjeta. Es decir, encontrar a partir de qué cantidad es rentable pagar las comisiones del cobro por tarjeta. A partir de esa cantidad se limitan o se permiten los pagos con tarjeta.
Enruta las tarjetas de forma inteligente
Se han desarrollado tecnologías que permiten seleccionar de forma inteligente el proveedor de pagos más rentable para cada una de las transacciones que se realizan. De este modo, el sistema "enruta" o busca un camino entre todos los posibles para realizar la transacción en las mejores condiciones posibles, permitiendo ahorrar comisiones y gastos. Por ejemplo, se tienen en cuenta variables como la red de tarjetas o el país de origen de la tarjeta y se elige la "ruta" más apropiada.
Utiliza opciones de cobro alternativas
Por último, muchas empresas que quieren hacer cobros online optan por opciones de cobro alternativas con el objetivo de reducir costes en el procesamiento de los pagos. Hoy en día, las opciones para cobrar online se han multiplicado hasta permitir la entrada de nuevos actores en el escenario de los pagos y cobros que permiten utilizar nuevas formas de cobro con tarifas más competitivas y otras ventajas que las hacen muy atractivas para negocios y clientes, como lo es el Open Banking.
Acepta pagos por Open Banking
Poco a poco se está imponiendo en el mercado una nueva forma de aceptar pagos online directamente de cuenta a cuenta, sin depender de un proveedor de tarjetas ni de procesos manuales como las transferencias bancarias. Lo cual supone un avance para dar facilidades a los clientes, pero sobre todo para reducir los costes del cobro por tarjeta.
La normativa PSD2 ha incentivado la entrada de nuevas formas de pago alternativas como el Open Banking, a través del cual se hacen cobros directamente a la cuenta bancaria del cliente con el objetivo de hacer transacciones más rápido y con total seguridad.
El Open Banking se encuentra regulado por la Directiva sobre Servicios de Pago 2, también conocida como normativa PSD2, que entró en vigor en España en enero de 2021. Se trata de una normativa bastante reciente, pero teniendo en cuenta el ritmo al que evolucionan los pagos y los cobros online, es una forma de pago que ya se está empezando a asentar poco a poco entre los comercios online.
El uso del Open Banking permite recibir pagos de forma inmediata de cualquier importe y permite establecer una vía de comunicación segura entre el comprador y el comercio online, ya que la pasarela a través de la cual se realiza el pago es la propia banca online. Los pagos por Open Banking son más seguros que las tarjetas y también resultan más rentables para las empresas porque sus costes son mucho menores.
Los pagos por Open Banking han llegado para quedarse y son una forma alternativa de recibir cobros de forma más rápida, de hacer pagos más cómodos y de reducir comisiones en el cobro con tarjeta.
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