Los planes de pago basados en el uso resuelven el reto de cobrar a los clientes a pesar de no haber hecho uso de una funcionalidad específica del producto, por ejemplo, lo cual hace que los precios se encuentren más alineados a la percepción que tienen del producto.
Según un estudio realizado en 2023, tres de cada cinco negocios SaaS han incluido algún tipo de cobro por uso en su pricing. Los modelos híbridos (suscripciones tradicionales más precios basados en el uso) están al alza, ya que se trata de una forma de adaptar un negocio a las preferencias de consumo actuales.
Contexto: el panorama de los precios basados en el uso
Evolución de los modelos de precio
En las primeras etapas, las empresas solían adoptar modelos de fijación de precios más tradicionales, basados en costos de producción, competencia en el mercado y márgenes de beneficio. Este enfoque era relativamente estático y no se adaptaba de manera eficiente a las variaciones en la demanda o al comportamiento del consumidor.
A medida que las empresas comenzaron a reconocer la importancia de la flexibilidad en la fijación de precios, se produjo una transición hacia modelos más dinámicos. La fijación de precios dinámica permitía ajustes más frecuentes en respuesta a cambios en el mercado, pero aún no abordaba completamente la personalización y adaptabilidad.
La aparición de tecnologías avanzadas y la revolución digital transformaron por completo la manera en que las empresas interactúan con los clientes y recopilan datos. Esto permitió una medición más precisa del uso de productos o servicios, allanando el camino para modelos de precios más personalizados y basados en el comportamiento del usuario.
La popularización de la suscripción como modelo de negocio representó un paso significativo hacia el precio basado en el uso. Las empresas empezaron a ofrecer servicios bajo suscripción, permitiendo a los clientes pagar según el uso y acceder a características específicas según sus necesidades.
El precio basado en el uso representa la culminación de esta evolución. En este modelo, los clientes pagan según la cantidad o intensidad de uso de un producto o servicio. Este enfoque proporciona flexibilidad máxima tanto para las empresas como para los consumidores, permitiendo adaptar los costos de manera directa al valor real obtenido.
¿Qué es el precio basado en el uso?
El precio basado en el uso es una modalidad de fijación de precios en la que los clientes pagan según la cantidad o el nivel de uso que hacen de un producto o servicio. En lugar de establecer un precio fijo independientemente de cómo se utilice el producto, el precio se determina en función de variables como la cantidad consumida, la duración de uso o la intensidad de la utilización.
Este enfoque ofrece flexibilidad tanto para las empresas como para los consumidores, ya que permite adaptar los costes de manera directa al valor real obtenido. Por lo tanto, el precio basado en el uso se ajusta más estrechamente a las necesidades y preferencias individuales de los clientes, lo que puede resultar beneficioso tanto para las empresas como para los consumidores en diferentes contextos.
Ejemplos de tarifas basadas en el uso
- Tarifas de Uso por Cantidad. Los clientes pagan por la cantidad exacta de un recurso o servicio que consumen. Esto se observa en servicios de almacenamiento en la nube, servicios de impresión, o incluso en servicios de energía.
- Modelos Pay-per-Use. Los clientes pagan por cada transacción o interacción individual. Este modelo se utiliza en servicios de pago por clic (PPC) en publicidad en línea o en servicios de telecomunicaciones donde se paga por cada llamada o mensaje.
- Precio por Usuario Activo. En algunos casos, las empresas cobran según la cantidad de usuarios activos. Esto es común en plataformas colaborativas, redes sociales empresariales o software colaborativo.
Configuración y gestión de planes de cobro basados en el uso
Configurar un modelo de cobro basado en el uso requiere más que establecer un coste por unidad. Este modelo de cobro exige a los negocios llevar un seguimiento muy preciso de los tiempos de cobro, la medición del consumo y múltiples métricas y variables que afectan al precio por uso.
A medida que los negocios SaaS crecen, mantener un modelo de precio fijo se convierte en algo poco realista. Implementar más modelos de precio distintos también requiere de herramientas más especializadas para manejar aspectos distintos como los precios, descuentos, upgrades, downgrades, facturación...
Los negocios necesitan unificar todas estos procesos de gestión en un mismo lugar para evitar al máximo la implicación del equipo tech y hacer que la gestión de cobros sea eficiente. Necesitan un sistema de billing robusto que pueda gestionar cobros recurrentes variables, llevar un seguimiento de la facturación, generar cobros con distintos modelos de precio y con el que obtener métricas también.
Combinar los planes de cobro basados en el uso con las suscripciones fijas, experimentar con nuevas estrategias de adquisición (lo que incluye hacer cambios en los precios o ofrecer planes personalizados) y hacer frente a los posibles upgrades o downgrades de los panes son solo algunos de los retos principales a los que debe enfrentarse cualquier negocio con precios recurrentes.
6 pasos para configurar tu sistema de cobro basado en el uso
1. Configura tu sistema de billing en Uelz
Comienza a utilizar Uelz conectándolo a tu sistema a través de la API o integrando nuestro checkout en tu página web. Después, elige entre las múltiples pasarelas y métodos de pago cuáles quieres ofrecer a tus clientes.
2. Crea un servicio y plan
Crea un nuevo servicio desde el panel de "Servicios y planes" y elige la opción de crear plan de "suscripción".
3. Elige la modalidad de precio por uso
En el campo "modalidad de precio" indica que vas a crear un plan con "precio por uso". En este punto se desplegarán todos los campos relativos a este tipo de cobro.
Recuerda que la cantidad que se cobrará a los clientes será por el consumo notificado desde tu sistema a la API de Uelz.
4. Establece las variables del plan
Introduce el precio por unidad del plan, es decir, el coste a partir del cual se calculará el importe variable. Elige la frecuencia con la que se hará el pago, la fecha de vencimiento (si la hay), el día de cobro y si se cobrará siempre con cada ciclo de facturación.
Uelz tiene dos opciones de cobro recurrente de importe variable con el fin de cada ciclo de facturación:
- Existe la opción de cobrar siempre por cada nuevo consumo, pero si en un mes en concreto no lo ha habido, se cobrará el valor del mes anterior.
- En el caso contrario, si no se ha producido consumo, ese mes no se realizará ningún cobro y se generará un cobro con valor 0€.
5. Establecer consumos desde la API de Uelz
Para el siguiente paso, necesitas el ID de venta, el cual te facilitaremos a través de nuestra API pública e indicar cuántos ciclos de consumo se utilizarán para el siguiente ciclo de facturación.
Una vez cuentas con los endpoints correspondientes en la documentación de la API podrás enviar las unidades de consumo a la API y así enviar cobros automáticos con los valores variables del cobro.